domingo, 10 de junio de 2007

De vuelta

La primera descripción de este blog decía algo así como "si hice este blog es porque espero algún día dejar de escribir en él".

El propósito era dejar de escribir porque ya habría superado la fobia. Si creyeron que estaba todo atrás, lamento desilusionarles. La fobia sigue ahí, pero he hecho avances. Si no he escrito ha sido de flojo, y porque he estado ocupado saliendo (jaja, ¿ya ven como estoy empezando a reir de mí mismo?).

Pues bien, le tengo mucho cariño a este espacio y quiero retomarlo. Me pondré al día y les contaré qué me ha estado sucediendo. Por ahora, eso de dejar de escribir si mejoro queda cancelado. Creo que este espacio podrá ser útil aún si mejoro. De modo que si no me leen en unos cuantos meses ya saben que no es porque esté saliendo todos los días, si no porque he sido flojo en escribir.

Cambié el diseño de la plantilla. Ahora en vez de un candado ven un gato. Me siento identificado con los gatos. No como Whiskas ni necesito arena para orinar, pero si se han fijado, los gatos no permiten que alguien a quien no 'conocen' se les acerquen. En cambio, arrancan, como si tuvieran miedo. A mí me sucede precisamente eso, arranco de quienes no conozco. Arranco de todo lo que parezca amenazante, aunque en este tiempo he aprendido que lo que amenaza a un fóbico social no es la situación, sino el miedo. Arrancamos de la posibilidad de sentir pánico. Es el pánico lo que nos frena y no las situaciones. Es un miedo a sentir miedo. Un miedo a los síntomas de la crisis de pánico. Quizás por eso este es el peor de los miedos, porque es temor al mismo miedo.

Lo importante es que estoy en el camino de resolver mis miedos. Es un camino muy lento. Pero creo que es mejor lento y seguro. Avanzar velozmente en esta 'carretera' podría terminar en algún 'accidente' con indeseadas consecuencias. Estoy recién saliendo de mi pequeño mundo a un mundo inmenso y desconocido. Estoy tratando de dejar de ser ese gato que ven asomado a su puerta. Intentando dejar de imaginar ese vasto mundo y empezar a vivirlo. ¿Me acompañan?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Tú sabes que yo te acompaño TOOOOOOO el rato, aunque vayamos un pasito pa'lante y un pasito pa'trás...igual vamos a llegar, además nadie nos apura; yo te ofrezco un pedacito de mi mundo y mi mano para cuando me necesites. TQM

Anónimo dijo...

pues te diré que me gusta más el nuevo diseño; los gatos tienen un espíritu libre, pese a que rehúyen lo desconocido y solo ofrecen cariño a quienes ellos eligen cuidadosamente (y suelen ser pocos). en cambio, el candado hablaba de limitaciones, y, paradójicamente, inseguridades. a ver si el cambio es verdaderamente simbólico y te contagias de ese espíritu libre. mis mejores deseos.

timorato dijo...

Pues a mí el candado me gustaba mucho porque reflejaba un poco la característica común de una forma de ser (o de pensar), aunque debo reconocer que no era muy terapéutico. Me alegro de que retomes el blog, estaré al tanto. Saludos.

Anónimo dijo...

aunque suene muy vacio, yo tambien tengo ese candado en mi blog y me sorprendi al verlo en el tuyo tratando este tema. Para mi significa (como para todos) un encierro pero tambien que en algun momento estuvo abierto y que eventualmente lo hará de nuevo...
es cuestion de interpretaciones y sobretodo te felicito por haber dado ese paso con el cambio de encabezado y que se refleje tambien en lo cotidiano. suerte